En la vida, a veces nos encontramos perdidos, sin rumbo claro y sin saber hacia dónde dirigir nuestros esfuerzos y energía. Es en esos momentos en los que necesitamos reorientar nuestra brújula interna, para volver a encontrar el camino que nos llevará a la paz, la satisfacción y la alegría. En este artículo te mostraremos cómo puedes hacerlo en 4 simples pasos. Identificar tus valores principales, ordenarlos por importancia, evaluar tu nivel de satisfacción actual con ellos y elegir nuevos comportamientos alineados con tus valores te permitirá vivir de manera auténtica y tomar decisiones coherentes. ¡Es hora de retomar el rumbo y vivir la vida que deseas!

Identifica tus 5 valores principales

El primer paso para reorientar tu brújula es identificar tus valores principales. Los valores son aquellos principios o creencias fundamentales que son importantes para ti, aquellos aspectos de la vida que consideras esenciales y que guían tus decisiones y acciones. Pueden ser diferentes para cada persona, ya que todos tenemos experiencias y perspectivas distintas.

Para identificar tus valores, reflexiona sobre lo que es realmente importante para ti. ¿Qué es lo que te motiva y te hace sentir realizado/a? ¿Cuáles son las cosas que te importan más en la vida? Puede ser la familia, la honestidad, la libertad, la justicia, el crecimiento personal, la creatividad, entre muchos otros. Toma tu tiempo para pensar y anota aquellos valores que resonaron contigo.

Recuerda que no hay una lista exhaustiva de valores, cada persona puede tener diferentes valores que considera importantes. No importa cuáles sean tus valores, lo importante es que sean auténticos para ti. Una vez que hayas identificado tus valores principales, pasarás al siguiente paso.

Ordena tus valores por importancia

Una vez que hayas identificado tus valores principales, es importante que los ordenes por importancia. Esto te ayudará a tener claridad sobre cuáles son los valores que tienen mayor peso en tu vida y que deberían guiar tus decisiones y acciones.

Para ordenar tus valores, puedes utilizar una lista o crear un esquema. Piensa en cada uno de tus valores y pregúntate cuál de ellos es más importante para ti. Luego, compáralo con otro valor y determina cuál de los dos tiene mayor relevancia en tu vida. Continúa con este proceso hasta que hayas ordenado todos tus valores. Recuerda que este orden puede cambiar a lo largo del tiempo, ya que nuestras prioridades y perspectivas pueden evolucionar.

Mientras hagas este ejercicio de ordenar tus valores por importancia, reflexiona sobre cada uno de ellos y el significado que tienen para ti. Pregúntate por qué son importantes y cómo te hacen sentir cuando los vives en tu día a día. Esto te ayudará a tener aún más claridad sobre cuáles son los valores que realmente deseas honrar en tu vida.

Evalúa tu nivel de satisfacción actual con tus valores

Una vez que hayas identificado y ordenado tus valores, es momento de evaluar tu nivel de satisfacción actual con ellos. Esto implica reflexionar sobre cómo estás viviendo tus valores en la práctica y qué tan alineados están con tus acciones y decisiones diarias.

Para evaluar tu nivel de satisfacción con tus valores, pregúntate qué tan fiel te has mantenido a ellos en los últimos tiempos. ¿Te sientes en paz y satisfecho/a con la forma en que estás viviendo tus valores? ¿O sientes que hay un desequilibrio entre tus valores y tu forma de actuar?

Es posible que descubras que estás viviendo tus valores de manera coherente y en armonía con lo que realmente es importante para ti. En ese caso, ¡felicidades! Estás en el camino correcto y probablemente sientas una gran satisfacción y alegría en tu vida.

Por otro lado, es posible que te des cuenta de que hay ciertos valores que no estás honrando de la forma en que te gustaría. Esto puede generar un sentimiento de insatisfacción o conflicto interno. Si ese es tu caso, no te preocupes, es una oportunidad para crecer y mejorar.

Evalúa qué comportamientos o decisiones te están alejando de vivir tus valores y piensa en acciones concretas que puedas tomar para cambiar eso. Esto nos lleva al último paso del proceso.

Elige nuevos comportamientos alineados con tus valores

Una vez que hayas evaluado tu nivel de satisfacción actual con tus valores, es momento de elegir nuevos comportamientos que estén alineados con ellos. Esto implica tomar conciencia de las acciones o decisiones que te están alejando de vivir tus valores y buscar alternativas más acordes con lo que realmente te importa.

Piensa en formas específicas en las que puedas vivir más en coherencia con tus valores. Por ejemplo, si valoras la honestidad, puedes comprometerte a ser más honesto/a contigo mismo/a y con los demás en tu vida diaria. Si valoras la familia, puedes dedicar más tiempo de calidad a tus seres queridos y priorizar su bienestar.

Recuerda que el proceso de elegir nuevos comportamientos alineados con tus valores no es algo que se hace de la noche a la mañana. Requiere tiempo, esfuerzo y dedicación. Pero cada pequeño paso que tomes en esa dirección te acercará más a vivir una vida auténtica y en congruencia con lo que realmente te importa. Y eso, sin duda, te traerá paz, satisfacción y alegría.

Además, es importante recordar que los valores son algo personal y único para cada individuo. No hay valores «correctos» o «incorrectos». Lo importante es que tus valores sean auténticos para ti y te guíen hacia la vida que deseas vivir.

Conclusión

Reorientar tu brújula interna es un proceso que requiere tiempo, reflexión y esfuerzo, pero los resultados valen la pena. Identificar tus valores principales, ordenarlos por importancia, evaluar tu nivel de satisfacción actual con ellos y elegir nuevos comportamientos alineados con tus valores te permitirá vivir de manera auténtica y tomar decisiones coherentes.

Recuerda que los valores son como una brújula interna que nos guía hacia la vida que realmente deseamos vivir. Actuar según nuestros valores nos brinda paz, satisfacción y alegría. Así que ¡no esperes más! Retoma el rumbo y comienza a vivir de acuerdo con lo que realmente es importante para ti. ¡Tu felicidad y bienestar lo valen!